lunes, 21 de diciembre de 2020

no ROMPAN TODO


Netflix insiste en un género que ha dado muy gratas experiencias en los últimos tiempos: el documental. "Rompan todo" es una versión amable y comercial de una expresión de claro corte rebelde; un fenómeno que tuvo mucho éxito en Latinoamérica. 

Inicialmente fue llamada "música progresiva" o "rock en español", este movimiento tuvo un caríz muy folklórico. De hecho, los discos que emergieron de esa movida reemplazaron a los grandes folkloristas en el ranking de ventas. Muchos de ellos, naturalmente, se iniciaron en la música cantando esas coplas. Tal el caso de Miguel Abuelo, que vino desde su Santiago del Estero natal hasta Buenos Aires a cantar chacareras; fue lo primero que presentó en La Cueva.

Pero ahí surge el primer inconveniente. En Rompan Todo aparecen músicos de toda América latina como si formaran parte de una misma cosa. Si bien así resultó, no se experimentó de esa manera. No en vano acá se lo empezó a llamar Rock Nacional, Rock Argentino o, tal vez la más precisa expresión, Rock de Acá.

El desfile inicial de músicos mexicanos desconocidos para el público local suena extraño. En Buenos Aires es más que normal que la historia reconozca el protagonismo de los uruguayos Shakers, luego de Opa, y más tarde de La Vela Puerta o el Cuarteto de Nos, según las épocas; de hecho, más recientemente, el rock vernáculo se regionalizó, se internacionalizó. ¿Quién duda de la influencia continental de Maná, Molotov o Juanes, por ejemplo? 

Da la impresión de que la producción hace un esfuerzo complaciente para dar una imagen de conjuntez a algo que la tiene. Esa complacencia, a su vez, resulta discordante con el título. 

También se percibe un excesivo protagonismo de un actor inicialmente modesto pero con cierta relevancia luego como productor, como es el caso de Gustavo Santaolalla. No se puede decir que el tratamiento es injusto, pero resulta un relato algo antojadizo.

Asimismo, la necesidad por dar épica al movimiento fuerza una narrativa política que no se ajusta a la realidad de esos jovenes rebeldes que no siempre tuvieron preocupaciones institucionales.

No se preocupen: como toda producción de Netflix, es linda para ver; especialmente para los que amamos el Rock... ¡de acá!

La reacción de Herodes


Esta noche se producirá la conjunción de Júpiter y Saturno, conocida como "la estrella de Belén". Hace 800 años que no se produce ese fenómeno celeste que guió a los Reyes Magos hasta el pesebre en el que había nacido el Niño Dios. San Mateo narra el encuentro de esos enviados con Herodes, la adoración al recién nacido y la huida de la Sagrada Familia a Egipto. "Herodes se enfureció y mandó matar, en Belén y sus alrededores, a todos los niños menores de dos años, de acuerdo con la fecha que los magos le habían indicado. Así se cumplió lo que había sido anunciado por el profeta Jeremías: En Ramá se oyó una voz, hubo lágrimas y gemidos: es Raquel, que llora a sus hijos y no quiere que la consuelen, porque ya no existen." (Mt 2, 16-18).