Descansan en Paz
Más allá de la época que nos haya tocado, el hombre normalmente cumple con determinados ritos y acude a determinadas celebraciones para honrar esto o aquello. Hay quienes van a la cancha, al teatro o una vernissage, o quienes confían en la repetición de una palabra para que algo suceda o se parten de angustia cuando alguien grita un gol anticipadamente. Pero, al mismo tiempo de decirnos cristianos, nos resulta dramático privilegiar la asistencia a la Misa dominical por sobre un clásico deportivo. La vida se nos escurre en una agenda intensísima de series televisivas, trabajo, deporte, etc, mientras desatendemos a las cuestiones realmente trascendentes de la vida, y de la muerte. Vivimos inmersos en una cultura que niega a la muerte; que valora el placer sobre la entrega, la comodidad por sobre el esfuerzo y las modas mundanas por sobre la trascendencia. Su credo menosprecia toda referencia a los ritos funerarios o al descanso final de los cuerpos, como si se tratara de una impostu...






